La final se jugó en Barcelona, el 7 de mayo de 1916. Lo hicieron el Real Madrid y el Athletic de Bilbao en el campo de la Calle Industria, que pertenecía al F.C. Así que Santiago Massana, capitán, tomó una decisión: a una señal suya los jugadores del Barcelona abandonaron el campo aunque los directivos presentes intentaron parar la rebelión y, después, desautorizaron la medida. Curiosamente, el árbitro de aquel partido fue Paco Bru, que había jugado con el Barcelona en las semifinales como está narrado. Pero el potencial de crecimiento de ambos clubes, sumado a circunstancias político-sociales semejantes a las que 103 años después siguen estando de actualidad, llevó a que blancos y azulgranas fueran creando, manteniendo e intensificando una rivalidad en la que en principio fueron los catalanes quienes llevaron ventaja: De 1902 a 1916 jugaron siete encuentros, todos amistosos, y el Barcelona ganó cinco, cediendo dos empates. El Barcelona estrenará estas camisetas en el próximo encuentro de El Clásico, el sábado 28 de octubre de 2023. Lo mismo para los frontales de las camisetas del partido del equipo femenino de la Liga F, que jugará ante el Sevilla el próximo 5 de noviembre. Y que jugó con el Barcelona el partido del 6-6: parte del equipo culé había llegado con retraso por un problema ferroviario y como faltaban jugadores y Paco era socio del club -porque había jugado con ellos tiempo ha, se le pidió que hiciera el favor de jugar -en la época para jugar en un club bastaba ser socio-.
Redondo entregó al madridista su camiseta con el número 5. El entrenador del Milan era un tal Carlo Ancelotti. Una familia madridista y la capitaL de España han sido los elegidos para dar forma a la presentación de una camiseta a la que MARCA ha tenido acceso. El pivote se marchó de la entidad madridista en el verano del año 2000 y las lesiones truncaron su fútbol en Italia. En el verano del 90 Ramón Mendoza le liberó del Madrid y recaló en el Atlético. Ya en el segundo tiempo, otro penalti a favor del Real Madrid, que le ataja Bru a Sotero Aranguren. En aquel tiempo, empero, su preponderancia no era total. Fue donde nadie habría ido y el saque sencillo del meta del Liverpool acabó en el 1-0. No era casualidad, y bien lo pueden contar Ulreich o Mendy. Según su testimonio, «nunca» olvidó ese término y confesó que decidió usarlo cuando se dio cuenta de unía dos cosas que le encantan: la cultura oriental y las motos: «Encontré que la palabra que yo creo que resumía mejor lo que estaba pasando y el sentimiento era ‘Motomami’. «Moto» significa más duro en japonés; mi madre siempre ha llevado motos Harley. Las motos siempre han formado parte de mi vida».
Durante la vida de los clásicos, ha habido numerosos jugadores que han vestido la camiseta de los dos equipos. Ahora, en un giro sorprendente, el Barcelona, tras tener un acuerdo con Sportify desde hace más de un año, dará un nuevo paso al estrenar una camiseta que lleva la lengua de los Rolling Stones. Es un acuerdo que se extiende por tres temporadas y arranca de forma oficial el 1 de julio de 2022. «Es un acuerdo beneficioso para ambas partes», dijo Felipe Reyes, embajador el Real Madrid, a los medios oficiales del club blanco. Lo hizo y, atención, con una camiseta distinta a las demás puesto que no tenía: las camisetas oficiales de los clubes eran escasas. El mejor futbolista rumano de la Historia puede presumir de haber vestido, con el 10 a la espalda, las camisetas de «los dos equipos más grandes». Tres Mundiales de Clubes y tres Intercontinentales para el equipo (de clubes y de selecciones) más laureado de la historia. Nieto del mítico Marquitos, Alonso entró en la cantera del Real Madrid en 2008, y estuvo allí durante dos temporadas, llegando a debutar con el primer equipo pero con una estancia efímera. En esas, se descubre que el Real Madrid sufriría la baja de Belaúnde, autor de dos goles en el encuentro previo.
Van cayendo los goles y el partido acaba 4-4. Se va a la prórroga. Y como queda dicho que no valía la diferencia de goles sino el número de victorias, hubo de irse a un desempate. En el último minuto, nuevo penalti a favor del Real Madrid: esta vez sí lo aprovecha Bernabéu y el 6-6 final obliga a ir a nuevo desempate. Llegaba a la final sin jugar un solo minuto, lo que hace que para la UEFA no fuera campeón, todo lo contrario que para su entrenador y su vestuario. El objetivo es rememorar las gloriosas noches europeas, contando entre ellas las 14 veces que el club blanco ha ganado la UEFA Champions League. Esta temporada no fue de las mejores del equipo blanco, camisetas real madrid baratas ya que no se logró levantar ningún titulo. En la vuelta en el Bernabéu, 1-1, y otro gol de Morata, que llegó con su equipo a una final que perdería ante el Barça.
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